domingo, 23 de febrero de 2014

33 AÑOS DE AQUEL 23-F

JUAN ANTONIO MATA MARFIL
juanantoniomata.blogspot.com



Tejero pistola en mano
33 años de aquel 23 de febrero de 1981, en el que un grupo de militares fascistas, alimentados por ideas y personas vinculadas a los 40 años de dictadura, secuestró el Parlamento de la Nación, en un intento de quitarnos la libertad y la democracia a los españoles. 

Los que ganaron aquella dramática y trágica Guerra Civil, levantándose contra un poder legítimo, el  
El pueblo defendiendo la democracia
Gobierno de la Republica, elegido democráticamente, no se resignaron a ver recortados ni sus privilegios ni su modelo autoritario de sociedad, cuando iniciamos el camino de la libertad y la democracia. Y los herederos de aquellos siguen sin aceptarlo y muchos de ellos están en los núcleos duros del poder actual, que un día y otro se les llena la boca de España, y abren las cuentas en Suiza.

No debemos olvidarlo, y  menos en estos momentos donde, por desgracia, vemos que desde el poder se quiere hacer retroceder buena parte del camino andado, no solo en campo social, sino también en el de las libertades.

Nuestro compromiso por la libertad y la democracia, debe permanecer inalterable.

Albacete, 23 de febrero de 2014



lunes, 17 de febrero de 2014

¿DOS AÑOS DE REFORMA LABORAL O DE DESTRUCCIÓN DE EMPLEO Y DE DERECHOS ?

JUAN ANTONIO MATA MARFIL
juanantoniomata.blogspot.com






Manifestacion contra la reforma laboral.
El pasado 12 de febrero se cumplieron dos años de la entrada en vigor del Real Decreto Ley, posteriormente convertido en Ley, de medidas urgentes para la reforma del mercado laboral.

En el preámbulo del mismo (ver) se afirma que la razón de los  profundos cambios operados en la Ley se deben a que desde el inicio de la crisis en  “España se ha destruido mas empleo y mas rápidamente que en las principales economías europeas…” y “…que la destrucción de empleo ha sido mas intensa en ciertos colectivos, especialmente los jóvenes, con tasas de paro del 50 por ciento…” y que “…el desempleo de larga duración…es también mas elevado que en otros países de la UE..”, al mantener “… una tasa de temporalidad de casi un 25%, mucho mas elevada que el resto de nuestros socios europeos…que es del 14%...”.
Por ello afirma que era necesaria esta reforma para “…fomentar la contratación indefinida y la creación de empleo..”, y “...promover la contratación por PYMES y de jóvenes…”,   para dar mayor estabilidad y seguridad al empleo, a través de la “flexiseguridad”, siendo por tanto una reforma “…en la que todos ganan, empresarios y trabajadores y que pretende satisfacer mas y mejor los legítimos intereses de todos”.

Hoy, dos años después de su entrada en vigor es necesario pararse siquiera por un momento para analizar si los objetivos enunciados por el Gobierno se han cumplido o si por el contrario las afirmaciones realizadas por las organizaciones sindicales  y por multitud de analistas, han demostrado lo contrario: que la ¿reforma?  ha servido para todo lo contrario, para destruir aún mas empleo, especialmente estable y de calidad, para incrementar la precarización del mercado de trabajo, para rebajar los salarios, para deteriorar la negociación colectiva y para romper, en definitiva, el cierto equilibrio existente en las relaciones laborales a favor de una de las partes, al darle todo el poder al empresario.

Con carácter previo a este balance, quisiera hacer unas breves consideraciones de carácter más general.

La primera es de perogrullo, pero necesario reflejar. Siempre entre los objetivos de una reforma está el interés por mejorar lo ya existente, para hacerlo mas útil, mas cómodo y mas seguro para sus usuarios. Pero esta reforma no ha cumplido estos objetivos, ya que lo realizado no ha sido una reforma, sino que se ha destruido lo esencial de lo existente para construir algo nuevo, pero no para todos, sino tan solo para el uso y disfrute tan solo de una parte. No se le puede llamar reforma, a aquello que termina empeorando lo existente y hace inviable la convivencia entre quienes lo habitaban.

La segunda, es afirmar que en la relación entre capital y trabajo existe desde siempre un fuerte desequilibrio a favor del primero y que el derecho del trabajo y el conjunto de normas y derechos laborales que se han ido estableciendo en el mundo  desarrollado, también en España, han intentado hacer que ese desequilibro disminuyera. Esta ha sido y sigue siendo la pelea desde siempre de los trabajadores y del movimiento sindical. Precisamente el Estatuto de los Trabajadores, que se aprueba al inicio de la transición política, año 1980, tenía como objetivo central dar un marco estable a las relaciones laborales, al tiempo que intentaba desarrollar y modernizar las mismas, reduciendo las imposiciones de los primeros y mejorando los derechos de defensa de los segundos.

La tercera, vinculada con la anterior es que no debemos olvidar que con esas reglas laborales nacidas del ET, tan denostadas y criticadas por este Gobierno, su partido y  la patronal, hemos construido en estos 35 años de democracia un país avanzado, moderno, con mas empleo, con mas derechos y con cotas de bienestar muy superiores a las que existían cuando se aprobó aquella norma, permitiéndonos acercarnos a la media europea.

La cuarta es el papel jugado en ese cambio por los trabajadores y sus organizaciones sindicales, por CC.OO. y UGT. Se ha afirmado y creo que con razón, que el dialogo social ha sido uno de los valores intangibles mas importantes de los que nos hemos valido para nuestro desarrollo y progreso y que Rajoy y el PP en su conjunto ha despreciado, vilipendiado y denostado.

Y la última, dejar sentado que esta crisis no la han creado ni los trabajadores, ni los sindicatos, pese a que somos las autenticas victimas y que la estamos sufriendo en nuestras propias carnes, vía paro y vía pérdida de derechos. Los auténticos responsables tanto en el terreno político como en el económico no solo no la están sufriendo al mismo nivel que los trabajadores sino que se están beneficiando de ella, al tiempo que saliendo reforzados política y económicamente.  

Son muchos los análisis y estudios realizados en estos días y todos, absolutamente todos, salvo los realizados por el propio Gobierno y algunos de sus voceros que no se los cree nadie, coinciden en que esta reforma solo ha servido para destruir mas empleo, abaratar el despido,  precarizar los nuevos empleos, rebajar salarios y romper, en definitiva, el marco de derechos laborales y sociales existentes y con ello el equilibrio entre capital y trabajo.

La realidad de nuestros Polígonos Industriales
Los datos reales, por más que se quieran enmascarar, lo dicen todo. (Ver estudio Fundacion 1º de Mayo) Se han destruido en estos dos años 1.354.644 empleos; los asalariados han disminuido en casi 600.000 mil y de ellos 375.000 era puestos fijos y a jornada completa; la población ocupada ha pasado de 18.100 millones a 16.700.000; el 93 por ciento de los contratos efectuados son precarios; y el 30 por ciento de los contratos indefinidos son con jornadas a tiempo parcial; los parados según la EPA del ultimo trimestre siguen en torno a los 6.000.000, habiendo aumentado en estos dos años en 989.800 trabajadores, situándonos en una tasa de desempleo en el 26.5 por ciento, lejísimos del 12 europeo, sin tener en cuenta los 300.000 que se calculan  que se han marchado al extranjero, bien de jóvenes o de emigrantes que han vuelto a su país, además de los llamados parados desanimados; 1.832.000 hogares tienen a todos sus miembros parados; el paro de larga duración (mas de un año) se sitúa en el 58.5 por ciento, habiendo aumentado mas de 5 por ciento; en estos dos años la tasa de cobertura del desempleo ha caído en mas de un 3 por ciento, siendo en estos momentos cerca de 4 millones los trabajadores que no cobran (el 81 por ciento de los jóvenes parados menores de 30 años, o el 51 por ciento en el caso de los mayores de esta edad).

A todo ello habría que añadir que en los centros de trabajo las condiciones de trabajo se han deteriorado, habiéndose perdido en estos años de crisis mas del 17 por ciento del poder adquisitivo de los salarios; o que muchos trabajadores tienen sus convenios sin negociar, pese a que están vencidos y en peligro sus condiciones de trabajo como consecuencia de la ultraactividad de los convenios regulada en la reforma; al tiempo que  los incrementos salariales de los convenios colectivos durante estos dos años no han llegado al 1 por ciento, pese a que la inflación ha sido muy superior. Los expedientes de regulación de empleo han aumentado fuertemente, fruto de una política de ajuste económico  y de las facilidades dadas por esta reforma laboral. Se están dejando morir multitud de empresas sin que por parte de los diferentes  gobiernos se este moviendo un dedo para evitarlo. Todo lo contrario. Ahí tenemos algunos ejemplos: Coca Cola, Solaria, Gamesa, Roca, Geacam, Tele Madrid, Canal Nou,  y un largísimo etc.

Manifestación de los trabajadores de Coca Cola
Es evidente que los objetivos reales de la reforma laboral y sus posteriores modificaciones, no tenia como objetivos centrales los enunciados en el preámbulo de la Ley, sino todo lo contrario: disminuir los costes laborales en un 30 por ciento, reducir los derechos laborales a la mínima expresión y debilitar al tiempo a las organizaciones sindicales y así preparar las condiciones favorables a sus intereses para cuando se inicie de verdad el proceso de recuperación económica, intentar disminuir a la mínima expresión la capacidad de respuesta y de movilización de los trabajadores. No en vano han despreciado también el dialogo social y han atacado despiadadamente a las organizaciones sindicales, concretamente a CC.OO. y UGT.

Esto es lo que Rajoy y el PP, nos han preparado para el futuro, y que a nosotros, los trabajadores nos toca hacer frente para evitarlo si queremos recuperar no solo los derechos, sino también la dignidad. Esta si que es la verdadera herencia que nos quieren endosar, que nos van a dejar, salvo que los trabajadores en su conjunto, junto con las organizaciones sindicales, seamos capaces de hacerles frente de verdad en todos los campos en el económico, en el social y en el político. Nadie va a venir a hacerlo por nosotros, que quede claro.

Y ello me lleva a afirmar, antes de finalizar, que el sindicalismo se clase siempre ha sido el instrumento necesario que los trabajadores hemos tenido para la defensa de nuestros derechos y que hoy son mas que nunca imprescindibles, si queremos de verdad parar estos recortes y recuperar el camino perdido.


Albacete, 17 de Febrero de 2014

martes, 4 de febrero de 2014

NACIONALISMO FRENTE A NACIONALISMO

JUAN ANTONIO MATA MARFIL
juanantoniomata.blogspot.com


El domingo estuve muy atento al mano a mano que Jordi Evole había conseguido coordinar entre el Presidente de Cataluña, Artur Mas y el expresidente del Gobierno de España, Felipe González., pese a que a la misma hora jugaban el Real Madrid y Atlético de Bilbao.

Me pareció un debate sereno, interesantísimo y esclarecedor, en el que por encima de todo primaron las buenas formas, la capacidad de diálogo de los participantes y los argumentos. También las propuestas. Elementos todos ellos ausentes hoy en la mayoría de los debates que vemos y oímos en los medios de comunicación. Los razonamientos y los argumentos de Felipe González, estuvieron muy por encima de los de Mas.

Y junto a ello, todos vimos que en todo este proceso de confrontación, la falta de argumentos serios y rigurosos tanto por parte de Mas y Rajoy para meternos, como han hecho ya, por un camino bastante peligroso y que a todas luces no conduce a ningún sitio, salvo a dividir la sociedad catalana entre si, y a esta con el resto de la sociedad española. Para mi fue evidente que la irracionalidad y la irresponsabilidad han primado sobre el dialogo y el acuerdo, al ponerse los intereses particulares, mas bien partidarios, por encima de los generales.

El choque de trenes esta servido, salvo que se logre de alguna forma pararlo, aunque han ido tan lejos las dos derechas nacionalistas, la catalana y la española, que hacen muy difícil retomar el camino de la racionalidad y el diálogo y con ello el del acuerdo que pudiera poner fin a este desatino.

O son otros los actores políticos y personales los que intervienen en la solución de este conflicto, o creo que este es casi imposible.  Tiempo al tiempo


Albacete, 4 de febrero de 2014.